"Inaceptable": Infantino comparado con el emperador Nerón y duramente criticado

Los sindicatos velan por los jugadores, ¡y con razón! Cuando se compara a Gianni Infantino con el emperador romano Nerón, vale la pena analizarlo con más detenimiento. Sergio Marchi, director de FIFPRO, da la voz de alarma. Denuncia las decisiones de la FIFA: ganar cada vez más dinero a costa de la salud de los jugadores. Entre los aficionados al fútbol, solemos hablar de espectáculos y grandes actuaciones, pero ¿qué pasa con los atletas que están detrás de estos grandiosos eventos?
Según Marchi, esto recuerda a la táctica de "pan y circo" que empleó el emperador Nerón en Roma. Es entretenimiento para el público general, pero queda poca protección para los futbolistas. Y es cierto, cuando se oye que las nuevas reglas estipulan que los jugadores deben tener 72 horas de descanso entre partidos, suena básico, ¿verdad? Sin embargo, demuestra que hay un problema. Un calendario abarrotado, una flagrante falta de descanso físico y mental: esto es lo que Sergio Marchi deplora profundamente.
Pero la FIFA, afirma, ignora las preocupaciones de los sindicatos. Esta organización de torneos, sin diálogo con los socios relevantes, parece autoritaria y puramente impulsada por la maximización de beneficios. Esto explica la frustración. Pero eso no es todo. ¿Por qué tanta incomprensión? Para muchos, el Mundial de Clubes no fue el éxito rotundo que pregonaba la FIFA. Pensemos en aquellos jugadores que estuvieron casi un año entero sin vacaciones. Imaginemos la situación. Además, las condiciones meteorológicas no eran las ideales: algunos partidos se celebraron con un calor sofocante. ¿Un ejemplo llamativo? Gianluca Prestianni, del Benfica, mareado en pleno partido contra el Bayern de Múnich, habló de un calor agobiante.
Es imposible, insiste Marchi, que se celebren torneos similares en estas condiciones el próximo año para el Mundial de selecciones nacionales. Es una cuestión de salud. Los futbolistas ya están bajo presión. Lo observado durante esta edición no debe repetirse bajo ninguna circunstancia. El mensaje de FIFPRO es claro: es urgente reaccionar antes de que estos prestigiosos eventos se conviertan en una carga para los jugadores, en lugar de una celebración del deporte mundial.
L'Internaute